DESCONTROL: Atacan a policias en Rosario, en una ocasion a solo seis cuadras de la jefatura

Por Alberto Martínez (*)

Ayer a solo seis cuadras, prácticamente en el patio trasero de la Unidad Regional II fue atacado un móvil que estaba de custodia ordenada por la justicia en un lugar donde anida un enfrentamiento entre rivales narcos precisamente por el control de la venta de estupefacientes en la zona.

La historia fue adelantada por nuestro portal a minutos del hecho y en exclusiva y tomada por los medios nacionales en la mañana de hoy dejando una sensación de mayor indefensión en la población que ve que ya su ultima linea de defensa es atacada de manera impune.

Hoy atacan a otro compañero sin mediar palabra en un servicio de policía adicional en la punta de linea de un micro del transporte urbano de pasajeros en un barrio de alto nivel de inseguridad y de alli la necesidad de custodia policial.

Este descontrol no es casual y mucho menos imprevisible. Se da en el contexto de una policía desmantelada no solo en lo material y en recursos sino fundamentalmente en lo anímico. Estamos asistiendo a sucesivos experimentos de chiquilines de laboratorios que con la anuencia de políticos inescrupulosos le dan rienda suelta al humo que venden.

En Rosario y creo que es en el único lugar del mundo, la mitad de las comisarias están CERRADAS. Si como lo leen CERRADAS por decisión del anterior gobierno socialista y por decisión ademas del actual gobierno del Partido Justicialista.

Barrios enteros han quedado sin una referencia del Estado, solo algunos pocos móviles (la mitad están parados y sin repuestos, cubiertas y combustible y la otra parte destinados a custodiar edificios y “personalidades” muchas de ellas ligadas o de pertenencia al hampa) y pocas y desprotegidas escuelas y centros de salud que también son blanco de ataques permanentes.

En tanto esto ocurre, desde la actual gestión solo se piensa en agraviar en cuanta oportunidad se les cruza a los trabajadores policiales que es obvio están desanimados por ello y el cúmulo de condiciones pésimas de labor comenzando por un salario indigno que a duras penas cubre la mitad de lo que necesita su familia para subsistir.

Es obvio que en esta situación podemos hablar mirando por el espejo retrovisor y volver a advertir lo que advertimos durante mas de una década de socialismo, sin embargo como ya lo hicimos preferimos mirar hacia adelante como siempre. En este punto debemos advertir que Perotti se equivoca con su actual política y equipo de seguridad.

Perotti ha firmado un cheque en blanco a un personaje (Marcelo Sain) que permanentemente se desborda emocionalmente y agravia de palabra y de hecho con un odio claro hacia la policía y los policías de manera generalizada y que ha demostrado antes y durante la gestión.

El gobernador es el mayor responsable de lo que ocurre y es por ende el que debe tomar conciencia de lo que ha facilitado para llegar a esta situación.

(*) Secretario General APROPOL

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