La actitud del gobierno con los policías es criminal en esta pandemia

Esta actitud del gobierno de Omar Perotti, Jorge Lagna (y su antecesor Marcelo Saín) Sonia Martoranoy la Jefatura de Policía de Emilse Chimenti y Ariel Zancochia y los caniches toys de la Plana Mayor y de la UURR se llevaron puesto en mayo a doce camaradas que le pusieron nombre y apellido a esta situación previsible.

No existe una sola gestión conocida desde las autoridades policiales y del Ministerio de Salud o de Seguridad para haber garantizado en tiempo y forma el acceso a la vacuna al personal declarado en los papeles como "esenciales” pero que en la realidad lo trataron como de descarte.

Ni hablar de la instrumentación y mucho menos del respeto a las mas mininas normas sanitarias. Por el contrario han apelado a los mas bajos recursos para apretar al personal que estando en el grupo de riesgo debían resguardarse en medio de la crisis. En este sentido la ultima medida fue desarmarlos a sabiendas de la crisis de seguridad que se viven y el riesgo de vida adicional al que los exponen por un capricho. Pero no olvidemos que también les cortaron los plus al igual a quejnes se enfermaban. ¿Se puede ser tan...?

No vamos a olvidar todo esto. La sangre de nuestros camaradas no será negociada. Los criminales que nos conducen son los responsables de estos doce compañeros y de los que desgraciadamente puedan sumarse.

Es obvio que la patología en si tiene características temibles y es inminente la posibilidad de contagio de cualquier persona, pero si a eso le sumamos el obligarlos a desarrollar una tarea como la policial sin ningun tipo de defensa y prevención real es lisa y llanamente enviarlos a morir.

Las victimas tienen nombre y apellido y los responsables también.

Que nadie se deje engañar. La vacunación llega tarde y será beneficiosa para cuando es segunda ola se haya ido.

APROPOL Noticias