El suboficial Ramiro Acosta es un joven policia que trabajaba en el Organismo de Investigaciones (OI) y que hace dos años esta en disponibilidad debido a que su jefe de entonces "se sintio espiado por el" lo imputo por supuesto “incumplimiento de los deberes de funcionario público” y ahora va a juicio oral. Nos cuenta el hecho en primera persona.
"...Hola a todas y todos, me llamo Ramiro Acosta y quiero contarles mi historia. Muchos saben que soy policía (profesión que elegí con mucho orgullo); actualmente me encuentro 2 años sin poder trabajar y estoy al borde de perder mi trabajo por algo que no hice; pero al parecer la justicia solo elijé ver lo que le conviene.
El hecho que motivo a que yo me encuentre en esta situación, probablemente a más de uno le resulté insólito y absurdo, pero ahora se los contaré:
En julio del 2019, fui a trabajar como cualquier día normal, charlando con mis compañeros de trabajo nos avisan que el director M.S., nos manda a llamar a todos para aclararnos algo sobre la línea de mando entre él y los fiscales de Rosario. Me doy cuenta que dos colegas con las que trabajaba no se encontraban en el lugar, por lo que decidí hacer una grabación y luego hacérselas llegar. Después de una semana estaban investigando un audio que estaba circulando entre los fiscales de Rosario y que supuestamente “tomó trascendencia pública”. Me llamó mucho la atención y le comento a mi jefa (de ese momento) que yo había grabado y le hice escuchar el audio a dos compañeras (para aclarar lo que había pasado y no generar un malentendido que involucre perjudicar a mis compañeros del lugar), ella me dice que va a hablar con el director para aclarar esta situación; al cabo de unos minutos regreso y me dijo que me iban a secuestrar el celular; me sorprendió lo que me dijo y le entregó mi celular.
El director M.S. saco una noticia “donde supuestamente lo estaban espiando” y se la envía al fiscal para luego imputarme por el delito de “incumplimiento de los deberes de funcionario público”; luego (M.S.) le solicito al jefe de policía que me pasara a “disponibilidad”, sabiendo que tranquilamente podía enviarme a otra dependencia policial a trabajar sin ningún problema y no perder gran parte de mi sueldo.
Luego de dos años y dos peritajes a mi teléfono celular, nunca se encontró “dicho audio” y hoy (23/03/2022) mi abogado me comenta que el fiscal va a elevar la causa a juicio igual.
Nunca falte; siempre llegaba 15 minutos antes a trabajar y me retiraba 15 minutos después; muchas veces me he quedado hasta 6 horas más de las que me correspondía; siempre traté de ser buen compañero y ayudar a quién lo necesitará, tanto como en mis horas laborales, como en mis horas de descanso; SIEMPRE TRATÉ DE SER UNA EXCELENTE PERSONA Y UN BUEN POLICÍA ¿y para qué?
Esto me genera mucha bronca e impotencia, porque al parecer ser policía es sinónimo de ladrón, delincuente. Es vivir pensando que un día podés ir a trabajar y no saber si vas a regresar a ver a tus seres queridos. Y por lo visto ser policía es saber que te va a caer todo el peso de la ley encima; y tenes que ver cómo, ladrones, delincuentes, usurpadores, asesinos y hasta otros policías corruptos ¡libres como siempre!
Parece que esperan a que uno se quité la vida para darse cuenta del gran daño que causan. Pero al parecer a la jefa de policía, al ministerio de seguridad y el mismo gobernador no les importa la situación de los empleados estatales.
Por favor compartan y ayúdenme a difundir esto".
Enviado a Maxi Pullaro REC Apropol Santa Fe
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