Los fiscales agravaron la acusación en el juicio tras la declaración de la denunciante. El debate se suspendió y este viernes se realizó una audiencia de procedimiento abreviado.
Por Andrea Viñuela
Un juicio por abuso sexual devino en una audiencia de procedimiento abreviado tras la declaración de la denunciante en el debate, que implicó ampliar la acusación. El imputado, un comisario identificado como Juan Cruz Esteban Lucca, admitió ser el autor de los hechos y será condenado a 13 años de prisión.
El juicio comenzó a tramitarse ante los jueces Susana Luna, Leandro Lazzarini y Octavio Silva. La acusación a Lucca fue realizada por los fiscales Celeste Minniti y Roberto Olcese, de la Unidad de Violencia de Género, Familiar y Sexual del MPA, mientras que el acusado contó con la representación de los abogados particulares Ignacio Alfonso Garrone y Clara Vázquez.
Al finalizar este viernes la audiencia de admisión de procedimiento abreviado, la denunciante, Abril –quien tramitó la supresión del apellido paterno y avaló que su nombre sea publicado–, agradeció el trabajo de los jueces “que hicieron las cosas bien” y de los fiscales “que se pusieron la camiseta de todas las personas que pasamos por esto”.
La joven estuvo acompañada por su mamá Silvina y su abuela, y por representantes de la agrupación Pañuelos Amarillos. Por su parte, tanto el acusado Lucca como sus abogados defensores reconocieron el acuerdo firmado, la pena acordada con la Fiscalía y la responsabilidad del hombre en los hechos atribuidos, incluso tras la ampliación realizada por los fiscales una vez que se concretó la declaración de Abril en el juicio. Los jueces analizarán los extremos del acuerdo y dictarán sentencia en el plazo de ley.
El caso
En 2021, Abril se presentó en la comisaría de la mujer y denunció a su papá por haber abusado sexualmente de ella. Los hechos ocurrieron en agosto de 2016, cuando ella tenía 16 años y se prolongaron durante los dos meses que la joven estuvo viviendo en la casa de su padre en Santo Tomé. La Fiscalía acusó a Lucca como autor de abuso sexual gravemente ultrajante calificado por el parentesco y la convivencia, en concurso real con promoción a la corrupción de menores calificado, y solicitó en los alegatos de apertura del juicio una condena a 17 años de prisión. Primero, Abril relató situaciones de manoseo, y que le mostraba fotos de contenido sexual, de él con otras personas. Sin embargo, cuando la joven, hoy de 21 años, declaró en el juicio agregó una situación concreta de abuso con acceso carnal, y que sospechaba que podían haber ocurrido en más oportunidades, ya que a veces se despertaba desnuda, con un olor extraño, y dolorida. Abril debía tomar una medicación por una dolencia en una rodilla, y Lucca le daba una pastilla que la joven presume eran somníferos. La denunciante explicó que nunca antes había relatado esos episodios, ya que les daban copias de las declaraciones y no quería que su mamá se enterara. Tras esta declaración en el juicio, los fiscales ampliaron la acusación a Lucca como autor de abuso sexual con acceso carnal calificado por el parentesco y la convivencia en concurso real con promoción a la corrupción de menores calificado. La defensa de Lucca propuso entonces tramitar un procedimiento abreviado, y el juicio oral debió suspenderse; finalmente, se acordó una condena a 13 años de prisión para Lucca que contó con el consentimiento de la joven denunciante.
La historia
En la audiencia de admisión del acuerdo, realizada este viernes en la sala 1 de los tribunales santafesinos ante el tribunal del juicio, la fiscal Minniti repasó la acusación y la prueba recabada durante la investigación, y reconstruyó la historia de los hechos denunciados por Abril. Al finalizar la audiencia, allegados a la joven dieron a AIRE más detalles de la historia.
Lucca reconoció legalmente a Abril como su hija cuando era una beba de seis meses; luego, no hubo vínculo entre ellos hasta que la joven cumplió 15 años y el acusado la fue a buscar a la escuela y le llevó un regalo. Para entonces, Abril tenía una relación conflictiva con su mamá, ya que no la dejaba salir; Lucca la convenció para que presente una carta en un juzgado de familia, con situaciones falaces, para que se disponga la mudanza de la joven con su padre. La resolución del juzgado de Familia nro. 3 salió en el mismo día de la presentación de Abril, y la mamá nunca fue entrevistada por los funcionarios. Silvina confirmó que realizó una presentación ante la Corte Suprema de Justicia de Santa Fe para que se investigue el proceso llevado adelante por el juzgado interviniente.
A los pocos días que Abril estaba viviendo con su papá comenzaron las situaciones de abuso; la primera persona en enterarse fue su abuela materna, y se mudó con ella. Cuando volvió a vivir con su mamá y su hermana, notaron el cambio en la personalidad de la joven y Abril les contó lo sucedido. Las mujeres intentaron convencerla para que radique la denuncia, pero la joven tenía miedo de Lucca, quien tuvo varias causas por apremios y violencia que nunca prosperaron. Tras la denuncia y el avance de la causa, Abril y su mamá comenzaron a tramitar la supresión del apellido paterno; varias víctimas de abuso, integrantes de la Agrupación Pañuelos Amarillos que acompañaron a la joven, les consultan cómo pueden dejar de llevar el apellido de su agresor, porque no es un trámite sencillo. Además, la mamá de Abril estuvo trabajando en un proyecto de ley, que ya pasó por comisiones en la Legislatura si bien aún no tuvo tratamiento en las Cámaras, de cupo laboral para víctimas de abusos sexuales e hijos e hijas de víctimas de femicidios.
Nota relacionada:
Fuentes: Aire de Santa Fe / El Litoral
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