“La seguridad pública es una cuestión de Estado y no de política partidaria para fines electoralistas”

El problema de la SEGURIDAD PÚBLICA

La crónica policial nos pone día a día en contacto con esos hechos antisociales denominados genéricamente delitos o más bien, con una mínima parte de ellos. Pero un estudio más adecuado de estos fenómenos, descubre a nuestros ojos la existencia de un mundo que vive en la penumbra de la ilegalidad en el que, eclipsando la trascendencia del hurto o del robo aislados, más o menos sensacionalizados por la prensa, o del crimen pasional predilecto de los cronistas y del público, aparecen como manifestaciones superiores de la criminalidad, extraordinarias organizaciones de delincuentes.

Estas gabillas, dedicados al robo, o a la extorsión, al despreciable comercio “del narco trafico”, estos con profundas ramificaciones internacionales, etc., están integradas por sujetos sumamente peligrosos que no titubean en apelar a cualquier medio, desde el engaño y el soborno hasta el asesinato para lograr sus alevosos designios.

Agravado hoy en día más con nueva modalidades delictivas, puesta de moda, por circunstancias socioeconómicas, rompiendo lo que en la jerga o abolengo delictual, se conocía, como “códigos”.

Todo esto lleva a la persona que enfoca científicamente los fenómenos sociales, al apasionante problema de la etiología del delito, es decir de las causas del delito y muy probablemente, a la conclusión de que la verdadera raíz de la mayor parte de ellos, está en la defectuosa organización social y económica, en deficiencias educativas y por ende morales, etc.

Indudablemente el delincuente, como ser social, es un producto no sólo de la herencia y de la voluntad, sino en mayor medida, del medio social en que vive y, este medio, condiciona en buena medida su conducta: ergo, para transformar al hombre, hay que modificar también el medio en que se cría y en que vive.

El prestigioso jurista italiano Cesare Bonesaana, marqués de Beecaria, en su obra Dei deliti e delle pene. Brindaba una teoría del delito sobre el tema. Decía que no importa la intensidad de la sanción, sino la seguridad de que todo delito, tarde o temprano, la recibirá. Aunque no sea grave, pero una sanción al fin. Ineludible, implacable. De esta forma se desalienta a quienes urden o cometen delitos grandes o pequeños; se expande una atmósfera saludable que empuja a encuadrarse dentro de la ley.

El brazo de la justicia luce largo y perseverante. Los instintos destructivos del hombre se aplacan al convencerse de que les espera, ineludiblemente, un castigo.

Tenemos que tener en cuenta a la Ley como fuente del Derecho Penal dentro del nuevo de las ideas jurídicas. Por ello, hay demostrar, encaminado desde un enfoque preliminar, de la Enciclopedia Criminologíca - Ciencias Penales -, es realizar una investigación criminal, eficiente y eficaz, que lleve a sus autores, a los estrados judiciales y concluya en una condena justa para que no queden dudas sobre su culpabilidad. 

Seguridad Pública. Debe ser política de Estado

Por otra parte, también sabemos que los varaderos responsables saldrán impunes, porque la justicia actual no se era efectiva porque están implicados varios de sus integrantes, para evitar el dislocamiento de esas estructuras que proporcionan incalculables beneficios, a los cuales no son ajenos. Esto es lo que produce inseguridad, y provoca angustia en la población, donde el delincuente solo u organizado, portan armas cuyo desenlace es imprevisible.

Los hechos sobran, y lo peor que nada asombra, la sensación de inseguridad esta en todos los niveles, y la respuesta de quien tiene que velar por la tranquilidad de los ciudadanos, no satisface, no tiene el grado de coherencia aceptable, no percibe una unidad de principios ni de esfuerzo.

La Señora Ministra, se ha inclinado a subrayar sus propio campo de interés, como si todavía estaría haciendo una campaña política, (marketing), pero no ha plasmado un plan de contingencia, por lo que toda su iniciativa conduce a soluciones no equilibradas, a menudo buscadas a través de ensayos con sus consecuentes errores, y cuando esto sucede es mi difícil lograr el éxito.

El principal error de la Ministra de Seguridad, es creer que sabe de seguridad y actúa como si fuera policial. Ella, lo única que debe hacer es suministrar recurso y medios, para que las fuerzas policiales actúen. También nombrar un Oficial Superior (de las fuerzas de Seguridad), a cargo, de todo el operativo en la Ciudad de Rosario, previo que como se dijo se elevare un plan de contingencias, planificado a corto, mediano y largo plazo.

Además, realizar operativos contra la delincuencia, es muy difícil separar la realidad de la ficción. Por diversas razones políticas, se dispone de pocos observadores objetivos, que puedan brindar un panorama detallado de las acciones en desarrollo o de los registros resultantes.

Por ello, opinamos a fin de aportar desde el punto de vista de la experiencia los aspectos que influyen en la relación del personal policial y la población que deben ser atendidos en forma integral, para realizar una forma eficaz de enfrentar a la delincuencia, y mejorar la imagen de las instituciones policiales.

Por ello, hay que generar un grupo de estudio, con personal idóneo, y experiencia en cada rubro, que permite soluciones más profundas y aplicables. Porque quien dirige la instituciones, no ha percibido el tema de la criminalidad esta sobrepasadas desde el punto de vista policial, y requiere una visión más amplia de la que observa la ley penal, reclamando la consideración de los hechos, no solo con las normas. Como dicen los viejos policías, “El Código Penal, es muy grueso pero no para la balas.”.

Por último, son los familiares de los occisos los más perjudicados, y doblemente lesionados. Por un lado debido al profundo dolor ocasionado por la muerte terrible la que fuera sometido su ser querido. Y por otro lado, darles a los mismos la posibilidad de elaborar un luto definitivo al ver entre rejas a los verdaderos culpables de tal injusto. Y para quienes creemos en un Ser Superior, el descanso en paz de todas aquellas víctimas que vieron terminadas sus vidas de la forma más terrible imaginada. 

AGRUPACION AZULES POR SIEMPRE

APROPOL Noticias