CHACO: Comenzó en juicio a cuatro policías en otra "causa armada"

Este lunes comenzó el juicio por la muerte en custodia policial de Leandro Bravo, donde cuatro policías del Chaco llegan imputados por supuesta tortura seguida de muerte y falsedad ideológica. EL INFORME DE LAS DOS JORNADAS REALIZADAS.

Es sin dudas una nueva causa armada que quedara demostrada en el transcurso del mismo pese a las ilegales presiones de algunos organismos públicos y privados de siempre.

Desde Inocente Colectivo su presidente Hugo Álvarez dio a conocer detalles de las primeras jornadas:

JORNADA 1.

CAUSA ARMADA BRAVO: Sólidos testimonios confirman la versión policial

Durante el inicio del juicio en el marco de la causa armada por la muerte de Leo Bravo en Chaco, declararon trabajadores policiales que asistieron al procedimiento.
Todos fueron coincidentes en que cuando llegaron los agentes al lugar, Bravo ya estaba reducido y acostado en el piso.
La alerta la dio una vecina a la cuál Bravo intentaba forzarle la puerta de su casa.

El 26 de febrero de 2022, el llamado desesperado de una vecina de la localidad de Charata (Chaco) alertó al personal policial de la comisaría de esa localidad.

Al llegar al lugar, se supo que un hombre en estado de euforia intento forzar la puerta de la vivienda de la señora Betty Scalone, este hombre era Leo Bravo.

En un video incorporado en la causa se observa a la perfección el estado de euforia violenta que sufre Bravo y como el trabajador policial Alexis Fleitas Nogueras soporta los golpes, gritos e insultos que este le propina. Se disponen cinco móviles policiales a fin de superar en número y resguardar la integridad de Bravo quien comienza a hiperventilar ante el estado violento que ensaya contra les trabajadores policiales.

Luego de reducirlo, a Bravo se lo aloja en la caja de la camioneta policial y es llevado al hospital más cercano. Al llegar fallece por diversos fallos cardíacos y multiorgánicos.

Los arma causas de siempre, la metodología de siempre.

En ese contexto -donde se confirmó que les cuatro trabajadores policiales que tuvieron relación con la detención de Leo Bravo hicieron lo profesional y humanamente posible para resguardar la integridad física del joven- se comenzó a tejer una CAUSA ARMADA que tendría ribetes bien conocidos por todos.

Para comenzar, se orquestó una campaña de desprestigio contra la institución policial del Chaco, se les asignó a trabajadores policiales de la democracia (que no superan los 27 años de edad) el rol de supuestos “represores” y “asesinos” que no acudieron al llamado de auxilio de una vecina, sino que hostigaron a Bravo con el único y supuesto fin de atormentarlo.

Por otro lado, se creó en el imaginario colectivo la figura de un Leo Bravo heróico, un joven estudiante de abogacía, padre de dos niños, que era sostén de familia, fiel hijo y protector hermano. Todo esto se reflejó en cada imagen con la cuál algunos medios parcializados escribían sobre el supuesto “martirio” que había pasado Bravo. Allí se lo retrataba abrazado a su madre y hermanas, bien vestido y en condiciones que reflejaban una salud sólida. De les trabajadores policiales no había foto y de ellos o lo que ellos podrían decir en su defensa, nada se escribía.

Volviendo a la realidad

Lo cierto es que -como sucede en estos casos- eso fue una fachada guionada por ciertos medios dirigidos desde la maquinaria arma causas.

La realidad es que Alexis Fleitas Nogueras, Franco Sosa, Enzo Gómez y Carlos Diaz son cuatro trabajadores policiales que cuando tuvieron que enfrentarse a la situación violenta que les reportó tener que reducir a Leo Bravo eran jóvenes de 25 años.

Los cuatro provienen de familias trabajadoras y humildes que hicieron enormes esfuerzos para que ellos pudieran tener una carrera y estudios en una Argentina signada por las desigualdades sociales que tanto atormentan a las familias trabajadoras.

Por su parte, ese Leo Bravo que retrataban “abrazado a su madre y hermanas, bien vestido y en condiciones que reflejaban una salud sólida” tenía al momento de los hechos casi 40 años. Había abandonado a su concubina e hijos, llevaba mucho tiempo ya en situación de calle y sufriendo problemas de adicciones. Según surge de versiones cercanas a la familia, fue rechazado por su propia madre y hermanas quienes llegaron a ponerle una restricción perimetral para que no se acercara a ellos.

Según se supo luego, Bravo fue denunciado por sus propias hermanas al haber reportado en contra de estás actitudes violentas al igual que lo hizo la tarde del 26 de febrero de 2022 contra les trabajadores policiales.
A la fecha de los hechos, Bravo llevaba unos cuantos años viviendo en las calles.

Al menos cinco denuncias obran en contra de Leandro Bravo, desde hurtos, resistencia a la autoridad y robos con violencia, su hermana (hoy querellante en la causa armada) lo denunció en varias oportunidades.

“Perdimos por jurado, hagamos un juicio normal”

El juicio que este 14 de octubre bajo la conducción del Dr. Juan Carlos Klauter, y las Dras. Andrea Sánchez y Lorena Cimbaro Canella, iba a ser un juicio por jurados pero a pedido de los acusadores giró a ser un juicio técnico con Tribunal Colegiado.

Este cambio tuvo origen en que El Comité Para la Prevención de la Tortura quedó expuesto a las críticas de toda la sociedad Chaqueña cuando un jurado popular declaró INOCENTES a trabajadores policiales en la CAUSA ARMADA Ponce de León.

El organismo que trabaja como órgano de control en cárceles y que tiene entre sus víctimas preferidas a trabajadores policiales había postulado una hipótesis de trabajo basada en los prejuicios y estereotipos que siempre se ensayan contra trabajadores de fuerza para intentar colar que Sebastián Ponce de Leon no había muerto producto de la ingesta prolongada de cocaína, sino que (al igual que Bravo) era un joven militante al cual “les policies males” habían hostigado únicamente por ser “herederos simbólicos, generacionales y culturales, de aquellos represores de antaño”.

Por supuesto el jurado desechó la postura del mismo Comité que es querella en la CAUSA ARMADA Bravo y declaró INOCENTES a les trabajadores policiales.Esta medida se apeló pero Cámara no hizo lugar a lo solicitado. El temor de que una nueva absolución por jurado se dé en este caso hizo que se pasara la mentira de la CAUSA ARMADA Bravo a un Tribunal Colegiado.

Dos años presos “por las dudas” y llegamos a juicio

Finalmente ayer comenzó el debate al cuáles trabajadores policiales llegan en libertad luego de haber pasado dos años encarcelados siendo INOCENTES.

En la primera jornada, el comisario Manuel Barreto hizo una declaración sólida afirmando y confirmando cada uno de los extremos que se dieron durante el procedimiento.

Por su parte también se habló sobre la señora Betty Scalone quien hizo el llamado de auxilio por el cuáles trabajadores policiales terminan deteniendo a Bravo, situación que quedó reflejada en sendos videos donde se ve la actitud violenta de Leo Bravo al momento de ser aprehendido.

Hasta el 18 de octubre continúa el debate con la declaración testigos y exposición de pruebas.

JORNADA 2

CAUSA ARMADA: “Leo Bravo estaba vivo cuando llegó al Hospital”

En la segunda jornada en el marco del juicio a raíz de la CAUSA ARMADA por la muerte de Leo Bravo, declararon entre otros las Dras. Daisy Chazarreta y Maria Oliva. La última es directora del Hospital Enrique Llamas de Charata y confirmó que le llamó la atención el estado de desnutrición, deshidratación y abandono que tenía Leo Bravo.

El martes 15 de octubre se celebró la segunda jornada de juicio en el marco de la CAUSA ARMADA por la muerte de Leo Bravo en la provincia de Chaco.

Entre los testimonios que más interesaron al Tribunal estuvieron los de la Dra. Daisy Chazarreta quien fue la primera médico en ver a Bravo.

Sobre esto declaró “Bravo entró caminando por sus propios medios, estaba desorientado pero caminaba”.
Está declaración es un duro revés para el conglomerado acusador, ya que desde el inicio del armado se intentó instalar en la sociedad la idea de que Leo Bravo había sido “asesinado” durante el traslado al hospital y había llegado “muerto” producto de la “golpiza” que supuestamente le habían proferido. Ayer esta versión se vino abajo definitivamente.

Por su parte la Dra. Maria Oliva, eminencia en Charata y directora del Hospital Enrique Llamas, afirmó que Bravo “no presentaba ningún signo de petequeado u otro relacionado con una maniobra de asfixia. Puedo descartar que eso se haya producido” afirmó.

Esta declaración dejó expuesta y al borde de una nueva denuncia por falso testimonio a la Dra. Virginia Creimer, quien había afirmado (como es parte de su repertorio) que a Leo Bravo lo habían asfixiado con el “mataleón”.
Por otro lado la Dra. Oliva depuso que le llamó la atención que Bravo estaba muy desnutrido, deshidratado y desmejorado en condiciones generales. No reconocía al joven qué se veía en la foto que utilizaron a nivel mediático para exponer el caso.

“Leo Bravo nos atacó a cuchillazos”

En 2017 Leo Bravo intentó asesinar a un trabajador de la municipalidad.

El Inspector Pogonza de la división de Tránsito, declaró que en una de los diversos episodios que sufría el occiso, Bravo lo atacó con un cuchillo.

Débora Sánchez, la hermana de Bravo declaró en la segunda jornada y denunció que a su hermano lo habían golpeado en el marco de un procedimiento en aquel momento. El hecho al cuál se refería era el momento donde Bravo intentó asesinar a Pogonza.

En aquel momento la denuncia no prosperó y se archivó. La Fiscalía de Derechos Humanos dónde se presentó la denuncia, tuvo en cuenta que en esa ocasión Leo Bravo había presentado un estado de euforia violenta y había intentado asesinar a una persona.

Un hecho similar fue el de febrero de 2022 cuando atacó a los efectivos policiales que hoy están siendo juzgados en el marco de esa CAUSA ARMADA.

Desaparecedores de pruebas y armadores de causas

César Collado, abogado defensor de dos de los trabajadores policiales, ha denunciado irregularidades en el caso desde el principio, incluyendo la desaparición de fotos de la primera autopsia y de una parte del riñón de la víctima.
En ese contexto, declaró ayer el fotógrafo Lugo, quien fue el encargado de registrar la autopsia a Bravo y respaldo todos y cada uno de los dichos del Dr. Collado en cuanto a la desaparición de evidencia.

Lugo confirmó ante el Tribunal que sacó fotos del riñón derecho y que en la maniobra de apertura del órgano, los médicos que realizaron la medida se sorprendieron cuando comenzó a brotar pus del órgano. Ante esto, Lugo declaró que los médicos afirmaron que el estado del órgano mostraba una asepsia de varios días lo cuál fue definitivo en el fallecimiento de Bravo.

Por su parte, Sebastián Ledesma ayudante fiscal, declaró que en la camioneta donde se trasladó a Bravo no se encontró nada que hiciera presumir que allí “hubo una golpiza” ni que se hubiera “lavado” el vehículo. Descartó con su testimonio todos los indicios que la acusación había plantado.

Los acusadores, muy nerviosos

El abogado defensor César Collado, ya había denunciado -al igual que lo hizo su colega el Dr. Sebastián Quintana- que la Dra. Virginia Creimer (perita pagada por los acusadores) no estaba inscripta en la nómina de peritos en general, en la especialidad médicos legistas. Está inscripción es necesaria para oficiar ese cargo en la provincia de Chaco.

Sobre esto en algunas declaraciones había sostenido “esto demuestra la grosería que el Comité Contra la Tortura de Chaco hizo, con una perito foránea, de extraña jurisdicción” y agregó que “lo más repudiable y asqueroso es que se le cedió el cuerpo a Creimer para que ella hiciera la segunda autopsia, cuando la propia Creimer solo era perito de parte y ni siquiera estaba habilitada legalmente para hacerlo”.

Todos estos extremos (los cuáles quedaron al descubierto ante la sociedad) mantienen muy tensos y en alerta a los acusadores.

Durante el fin de la jornada y con el micrófono abierto los abogados de la querella por el CPPT Chaco (Comité para la prevención de la tortura) hicieron un comentario desagradable contra el Dr. Collado “que vaya a estudiar derecho penal” lo cuál quedó registrado y ante lo cuál el propio Collado respondió “soy profesor de Derecho Penal y Procesal, cuando quieran les doy una clase, que por las atrocidades que hacen, mal no les vendría”.

Hoy miércoles 16 continúa el debate.

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