Antes de ayer, el director de Bienestar de la Policía Ignacio Paz, anunció con entusiasmo una nueva capacitación destinada al personal. ¿El tema? Manejo de la economía personal.
Por Mercedes «Mecha» Iñiguez (*)
Un intento, al parecer, de ayudar a los trabajadores a administrar mejor sus ingresos. Pero las palabras del funcionario dejaron más dudas que certezas. también haciendo incapié por la cantidad de tentativas de suicidio del personal policial.
Es legítimo preguntarse si este funcionario sabe realmente cómo vivimos los trabajadores policiales. Porque mientras desde su oficina propone capacitaciones, somos nosotros —los trabajadores— quienes todos los meses ponemos dinero de nuestro propio bolsillo para que las dependencias funcionen. Compramos artículos de limpieza, materiales de librería y hasta pagamos el servicio de internet que mantiene conectadas nuestras unidades. Y ahora, con la propuesta de “despapelizar”, nos piden aún más, sin ofrecernos los recursos necesarios.
Desde su lugar, el director parece mirar desde muy arriba a quienes debería defender. Olvida que es un funcionario público, y que su rol en Bienestar debería ser estar cerca del trabajador, no alejado en el discurso. En estos años, no lo hemos visto recorriendo las dependencias, escuchando de primera mano nuestras problemáticas.
¿Dónde estaba cuando dejamos de recibir uniformes? ¿Acaso no era parte de sus responsabilidades?
Es ofensivo pensar que una charla sobre economía pueda solucionar el drama que muchos compañeros viven. Porque la realidad es cruda: hay ingresos al borde de la indigencia. Quien logra llegar a mitad de mes sin caer en el endeudamiento, más que capacitación, merece una medalla. Si tan efectivo fuera su consejo, este funcionario debería estar al frente del Ministerio de Economía de la Nación, no en un cargo que hoy le queda grande.
Hacen falta decisiones estructurales, equipos serios, profesionales idóneos y no un entorno de cuestionados de siempre. Es necesario que el bienestar deje de ser una palabra vacía y se convierta en una política tangible.
Porque a esta altura, lo único claro es que, de bienestar, su gestión tiene poco. Y de paz, nada.
(*) «Mecha» es personal policial de Santa Fe en actividad
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